QUERIDO UNIVERSO: ESTOY LISTA PARA RECIBIR TODAS TUS BENDICIONES

a veces es mejor olvidar lo que uno siente y recordar lo que uno vale

A veces es importante. A veces pensar por dos segundos no está mal. A veces acordarte de lo que siempre has soñado puede ser bueno. A veces dejar la estupidez a un lado alivia. A veces darte cuenta de que tú no quieres ni necesitas a alguien increíble a tu lado... sino que lo mereces; es esperanzador. A veces desbancar todas las mentiras que tú misma te has dicho y dejar de manipularte alimentando obsesiones eternas es sano. A veces darte tu lugar es chévere. A veces dejar de cometer los mismos errores puede hacerte avanzar. A veces es hasta lindo dejar de romperte las uñas tratando de que pase algo que no te conviene, que no te aporta, que no te va a hacer tan feliz como tú crees. Sí! A veces es importante: pero sólo a veces, ¿no?....... ¿Qué es lo que nos pasa? ¿Cuál es nuestra incapacidad de de vivir a partir de nuestros principios? Hoy, sólo por hoy, entiende que a veces es un buen momento para aterrizar. Deja de pelear en contra de los planes (perfectos, nunca en tu viiida lo dudes) que el de arriba tiene para ti, deja de buscar amor donde sólo hay decepciones, deja de tocar paredes esperando volverlas puertas, deja de ver perfección donde solo hay fantasía, deja de irrespetarte, deja de perder el tiempo alimentando una idea de alguien que tú sola te inventaste; no suena bien pero... deja de regalarte. Aprende a ser capaz de ver al individuo como es: no como fue, como puede ser o como tú quieres que sea dentro de tu ilusión. Aprende a no tolerar jueguitos maricones. Aprende a basarte en hechos y no en palabras sin peso. Aprende a dejar ir a quien no tiene intenciones de quedarse. Aprende que a veces no recibir lo que quieres no es un castigo sino una bendición. Aprende a tener fe y a soltar situaciones dañinas, a oir las alarmas de tu alma y a callar tu ego, a interiorizar que eres iguual de divina, interesante y alucinante sin él. Aprende que de pronto este personaje simplemente no es para ti por una razón muy sencilla: porque tú mereces (acuérdate: ¡mereces!) algo mil veces mejor. Aprende a respetarte. ¡Aprende! ¡¡Aprende de una vez por todas que vales oro!!
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